martes, 7 de agosto de 2012

MÍNIMO




                                                  

Allá por fines de la década del ´60 en medio de una acalorada conversación con alumnos universitarios, el psicoanalista francés J. Lacan ante la franca ignorancia demostrada por uno de sus interlocutores, decía casi al modo de súplica: “hace falta un mínimo”.
Comenzar con esta peculiar anécdota para hablar sobre música podría parecer un recurso “desentonado”, si no fuera porque hace pocos días salió a la venta un disco de jazz de Gabriel Domenicucci, que además de psicoanalista es músico, y de los buenos. Este nuevo trabajo lo tituló “Mínimo” porque según dice: “Mínimo es el nombre que materializa el proyecto de    
desplegar elementos musicales, estética y conceptualmente simples.
Mínimo es condensación y libertad a la vez. Es la resultante de la combinación de la escritura y la improvisación. Mínimo es una idea en tránsito...”

         
Y es verdad… el concepto musical por el que transita  “mínimo” tiene una estética que se despliega en dos carriles, que podríamos nombrar como lo sugerente y lo delicado. Lo delicado lo encontramos en los detalles de los arreglos que presentan un ensamble de transiciones sutiles que permiten la aparición de una melodía cuidada y por momentos muy sugerente. Y claro que para lograr esto hace falta un mínimo que implica que además de  rodearse de buenos músicos que acompañen –punto destacado de esta obra, en la que además del contrabajo del propio Domenicucci sobresale la trompeta de Sergio Wagner- hay que poder lograr llevar el concepto al pentagrama, que en este caso implica el trabajo de lograr plasmar la calidad que existe en la simpleza, fundamentalmente en esta época en donde el jazz se convierte muchas veces en un estilo musical en donde el virtuosismo narcisista prima sobre lo que el arte mismo implica, es decir, la posibilidad de ser compartido. Es que en psicoanálisis como en música, “hablar mucho” no significa decir algo. Pero para decir algo, hace falta un mínimo, y eso es lo que transmite este disco.


                                                   Lionel F. Klimkiewicz


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